Las elecciones legislativas y presidenciales de 2022 son un reto decisivo para el Centro Democrático. El partido de gobierno tendrá que jugar estratégicamente si no quiere perder representación en el Congreso de la República, ya que fue gracias a la alta votación del expresidente Álvaro Uribe Vélez que logró ser la colectividad dueña de más curules para el actual período, y en estas votaciones su nombre no aparecerá en los tarjetones.
Pese a que no estará su rostro a disposición de los colombianos, el exmandatario inició el año haciendo campaña pura y dura. En los últimos días se le vio en las calles de Montería y Planeta Rica, Córdoba, entregando volantes con propuestas y pidiendo el respaldo de los electores que, a día de hoy, no le han fallado. Su relacionamiento con la gente y actitud para divulgar los postulados de su partido le han hecho merecedor de halagos de sus congresistas, quienes saben que sin su apoyo poco y nada pueden lograr.
Además del impacto que generó en las calles, en redes sociales llamó la atención la aparición de Uribe en los mencionados territorios, pues es de señalar que estuvo alejado de la plaza pública tras su renuncia al Senado, en agosto de 2020, por la investigación que adelanta la Fiscalía en su contra por los presuntos delitos de soborno de testigos y fraude procesal.
En septiembre pasado, cuando se desarrollaba el proceso de elección del candidato del uribismo, declaró que no apoyaría a ningún candidato porque temía afectarlo por su situación jurídica. No obstante, el exmandatario sabe que es su figura la que tiene los votos, más que los proyectos políticos que han construido los miembros de su partido, por lo que no tardó en reaccionar y volcarse a las calles para pedir el respaldo de la gente.
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