La noche de este viernes, la situación de orden público en California, Santander, se complicó luego de que la comunidad tomara la decisión de sacar del parque y del municipio, a los uniformados del Ejército. Cabe recordar que la mañana de este lunes, un minero murió en el sector de Angosturas, tras enfrentarse a soldados que, al parecer, realizaban un operativo en contra de la minería ilegal.
La víctima fue identificada como Sergio Lizcano Díaz, quien precisamente se había pensionado del Ejército Nacional. En California no se registraba un hecho violento -y menos como el ocurrido- desde hace 21 años.
Según Genny Gamboa, alcaldesa de California, «el Código de minas favorece a los grandes, convirtiendo al pequeño minero en ilegal siendo criminalizado y perseguido por la fuerza pública».
Por su parte, el ejército manifestó, entre otras cosas, que «en medio de la asonada el personal civil forcejeó con los militares, y en un intento de quitarles sus fusiles se desencadenó el fatal hecho», dijo el general Omar Esteban Sepúlveda Carvajal, comandante de la Segunda División del Ejército Nacional.
En el territorio se realizó un consejo extraordinario de seguridad para determinar las medidas de orden público y seguridad.
«El Secretario del Interior John Jaime Ruíz presidió el Consejo de Seguridad en California. Los hechos ocurridos exigen investigación de autoridades competentes y diálogo ciudadano, para recuperar la tranquilidad en la comunidad de este municipio.
Aquí las conclusiones del Consejo de Seguridad:
1. Esta semana se realizará una mesa técnica entre la Gobernación de Santander y la Alcaldía de California para presentarle al Gobierno Nacional estrategias que le den solución definitiva a los temas de minería.
2. Con el apoyo de la Defensoría del Pueblo se tendrá una mesa de diálogo con la comunidad.
3. Apoyo a las autoridades de Policía Judicial para que puedan esclarecer los hechos ocurridos en los que lamentablemente una persona perdió la vida.
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