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La menor fue golpeada durante dos minutos con palos por varios hombres. Organizaciones defensoras de derechos humanos califican el hecho como una violación intolerable.

Un caso de violencia extrema contra una menor de edad por parte de miembros del cabildo indígena Gito Dokabu, en el departamento de Risaralda, ha causado conmoción nacional y reavivado el debate sobre los límites del derecho propio frente a los derechos fundamentales.


En un video que circula en redes sociales, se observa cómo varios hombres agreden a la niña con palos en sus piernas y glúteos durante aproximadamente dos minutos, en un aparente acto de castigo colectivo. El hecho ha sido catalogado por organizaciones defensoras de derechos humanos como un acto inhumano e inaceptable, que vulnera gravemente la integridad de la menor.


La Comisión Nacional de Mujeres Indígenas de Colombia hizo un llamado urgente a las autoridades del territorio Gito Dokabu para que investiguen y sancionen a los responsables, respetando los principios del derecho propio, pero también en armonía con los derechos fundamentales consagrados en la Constitución.


De manera extraoficial, se ha denunciado que la niña habría intentado quitarse la vida tras ser sometida al castigo. Sin embargo, hasta el momento ninguna autoridad ha confirmado oficialmente su fallecimiento.


Este caso ha generado una ola de rechazo en todo el país. Líderes sociales y defensores de infancia han señalado que ninguna tradición ni norma comunitaria puede justificar la violencia física contra una niña.


“Debe investigarse con la mayor rigurosidad. La justicia ordinaria y la indígena tienen el deber de proteger la vida y la dignidad de las mujeres y niñas”, expresó una vocera de la Defensoría del Pueblo.


Las autoridades continúan recopilando información para esclarecer los hechos y determinar las acciones a seguir. Mientras tanto, la opinión pública exige respuestas claras y garantías de no repetición.


La menor fue golpeada durante dos minutos con palos por varios hombres. Organizaciones defensoras de derechos humanos califican el hecho como una violación intolerable.


Un caso de violencia extrema contra una menor de edad por parte de miembros del cabildo indígena Gito Dokabu, en el departamento de Risaralda, ha causado conmoción nacional y reavivado el debate sobre los límites del derecho propio frente a los derechos fundamentales.


En un video que circula en redes sociales, se observa cómo varios hombres agreden a la niña con palos en sus piernas y glúteos durante aproximadamente dos minutos, en un aparente acto de castigo colectivo. El hecho ha sido catalogado por organizaciones defensoras de derechos humanos como un acto inhumano e inaceptable, que vulnera gravemente la integridad de la menor.


La Comisión Nacional de Mujeres Indígenas de Colombia hizo un llamado urgente a las autoridades del territorio Gito Dokabu para que investiguen y sancionen a los responsables, respetando los principios del derecho propio, pero también en armonía con los derechos fundamentales consagrados en la Constitución.


De manera extraoficial, se ha denunciado que la niña habría intentado quitarse la vida tras ser sometida al castigo. Sin embargo, hasta el momento ninguna autoridad ha confirmado oficialmente su fallecimiento.


Este caso ha generado una ola de rechazo en todo el país. Líderes sociales y defensores de infancia han señalado que ninguna tradición ni norma comunitaria puede justificar la violencia física contra una niña.


“Debe investigarse con la mayor rigurosidad. La justicia ordinaria y la indígena tienen el deber de proteger la vida y la dignidad de las mujeres y niñas”, expresó una vocera de la Defensoría del Pueblo.


Las autoridades continúan recopilando información para esclarecer los hechos y determinar las acciones a seguir. Mientras tanto, la opinión pública exige respuestas claras y garantías de no repetición.


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