Inicialmente se concentraron en la Plaza de la Paz y luego se movilizaron al centro de Barranquilla.
En la marcha, a la altura de la carrera 44, entre calles 38 y 44, extensión de la marcha, se escuchó un minuto de silencio y luego un sonoro aplauso.
El sonido de las bubucelas se hizo más fuerte y el coro: "No más extorsión", se hizo más fuerte.
Además de Undeco, otros gremios como Asocentro y Asaba, se sumaron a la protesta. Por eso, el comercio en el centro cerró totalmente sus puertas al público.
A lo largo del recorrido se escuchó amplificado el sonido de disparos, para hacer público el sufrimiento diario de este sector de la producción.
Leonardo Diaz, comerciante, recordó que la extorsión es un flagelo "que viene creciendo desde hace 3 años".
"Muchos compañeros muertos. Las autoridades no se enteran de todo, no sé qué están pasando o la información no les llega", se lamentó.
Según dijo, además de negocios cerrados "han acabado con prósperas familias de comerciantes". "Ya no aguantamos más porque pagamos impuestos o pagamos extorsión", señala.
La marcha terminó pasadas las 10:45 de la mañana frente a la Alcaldía de Barranquilla.
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