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Durante la mañana de este jueves y con más de una hora de retraso, la Superintendencia de Sociedades lleva a cabo la audiencia pública para ver el cúmulo de enredos que tiene la empresa de supermercados Justo & Bueno, desde que se adelanta su proceso de reorganización. 


La sesión estuvo liderada por el delegado de procedimientos de insolvencia de la Superintendencia de Sociedades, Santiago Londoño Correa, quien reveló la cifra de quejas e incumplimientos que tiene la compañía, a pesar de acogerse a la Ley de Insolvencia y así pagar sus pasivos, gracias al proceso de reestructuración. 


Según evidenció el delegado, contra Justo & Bueno hay 501 denuncias de incumplimientos con los gastos administrativos, hay 20 tutelas provenientes de acreedores y arrendadores, y 98 memoriales laborales pidiendo pago de nómina y liquidación desde que se inició la reorganización. Además, 371 quejas de arrendadores pidiendo pago y fecha de restitución de inmuebles y 14 de acreedores de compañía de gastos de administración.


Por otra parte, Claudia Ortega, apoderada de los fondos de pensiones y cesantías, reveló que en total se registran deudas por más de 1.040 millones de pesos por aportes a pensión con tres fondos diferentes. Con Porvenir suman 600 millones de pesos, con Protección otros 332 millones y con Colfondos la suma llega a 108 millones.


Según registró el auto, el pasivo registrado posreorganización de la deudora (Justo & Bueno) ascendía hasta marzo a la suma de $ 96.583′000.000. Sumado a ello, se presentó una notoria disminución en el número de empleados, producto de renuncias. Además, múltiples cierres de tiendas y una incertidumbre por parte de los trabajadores por lo que pasará con sus empleos, más aún cuando la empresa fue vendida a una compañía extranjera.


Según un vocero de los empleados, son más de 7.000 los que esperan impacientes el pago de sus salarios, con atrasos superiores a 90 días. Hay otros que no han recibido recursos de liquidación para enfrentar la desocupación, mujeres con licencia de maternidad, entre otros factores.


Como si fuera poco, Justo & Bueno también recibió quejas de la Dian, pues un vocero de la entidad denunció que la cadena debe 16,2 millones de pesos por impuesto al consumo; sin embargo, la mayor deuda la tiene por retención en la fuente. En total son 20,4 mil millones contando con los atrasos desde septiembre de 2021 hasta marzo de este año, más los intereses.


La Superintendencia de Sociedades seguirá recibiendo quejas por parte de quienes piden intervenir para exponer su afectación con los incumplimientos de pagos. La decisión final podría ser la liquidación de la compañía al no demostrar que se pudo reorganizar.



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