En medio de los enfrentamientos entre la barra Los del Sur y el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía, se registraron momentos de tensión en los alrededores del estadio Atanasio Girardot de Medellín. Los aficionados se enfrentaron con la policía, arrojando piedras y objetos contundentes, mientras que la fuerza pública respondió con gases lacrimógenos y el uso de la fuerza para controlar la situación.
Ante esta situación, las autoridades decidieron suspender el partido entre Atlético Nacional y el América de Cali, que se esperaba con gran expectativa. Esta es la segunda vez en lo que va de la temporada que se suspende un partido de la liga colombiana debido a disturbios entre los aficionados.
Los del Sur, la barra más grande de Atlético Nacional, ha sido protagonista de varios enfrentamientos con la policía en los últimos años. El equipo ha tratado de distanciarse de la barra, argumentando que las acciones violentas no representan los valores del club.
Sin embargo, los seguidores de la barra han denunciado que la decisión del club de suspender los beneficios económicos con Los del Sur ha generado una fractura entre el equipo y los aficionados, y han aumentado su descontento en redes sociales.
La Dimayor, organizadora del torneo de fútbol en Colombia, ha condenado los hechos de violencia y ha anunciado que se tomarán medidas para garantizar la seguridad de los aficionados en los próximos partidos.
El fútbol colombiano ha estado marcado por la violencia y los enfrentamientos entre las barras de los equipos. Las autoridades y los clubes han hecho llamados a la tolerancia y el respeto entre los aficionados, pero la situación sigue siendo preocupante y se necesitan medidas más efectivas para evitar estos incidentes violentos.
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