La valiente acción de patrulleros de la Policía y mototaxis de Montería se llevó a la captura de dos individuos sospechosos de cometer robos de celulares en la ciudad. Tras una intensa persecución por toda la circunvalar de la ciudad, los delincuentes fueron detenidos y ahora enfrentarán el proceso judicial correspondiente.
El episodio de alta tensión tuvo lugar en la noche del lunes, cuando agentes de la Policía se encontraban realizando un plan candado por el robo de una farmacia en el barrio Monteverde. En medio de su labor, recibieron reportes de varios atracos a mano armada en los que los delincuentes huían rápidamente. Sin perder tiempo, los uniformados iniciaron la persecución de los sospechosos, quienes hacían todo lo posible por evadir su captura.
La espectacular persecución se extendió por varios minutos, recorriendo calles y avenidas de la ciudad, manteniendo en vilo a los transeúntes y conductores que presenciaban la escena. Sin embargo, gracias a la rápida y efectiva acción de los mototaxis y la policía, los delincuentes fueron alcanzados y detenidos.
Durante la intervención, se descubrió que los sujetos portaban un arma de juguete y un teléfono marca iPhone. Posteriormente, se presentó ante las autoridades la víctima, una mujer de 25 años, quien afirmó que los mismos individuos la habían intimidado con un arma y le habían robado un teléfono en la calle 35 con carrera 2.
La captura de estos presuntos ladrones de celulares es un importante logro en la lucha contra la delincuencia en Montería. La ciudad ha experimentado un aumento en los casos de atracos en los últimos tiempos, lo que ha generado gran preocupación en la comunidad. Por lo tanto, la acción policial y la colaboración de los mototaxis demuestran un avance significativo en la seguridad de la zona.
Siguiendo los protocolos establecidos, a los individuos capturados se les informaron sus derechos como personas detenidas y fueron trasladados al Centro de Atención Médica de Urgencias (CAMU) de La Granja para recibir la atención necesaria ya que recibieron golpes por algunas personas. Posteriormente, fueron puestos a disposición de las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) para continuar con el proceso judicial correspondiente.
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