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Este martes marca el inicio de lo que el expresidente Álvaro Uribe ha llamado "la prueba de fuego" para el proyecto de ley que busca regular la comercialización, distribución y consumo recreativo de la marihuana en Colombia. Uribe, conocido por su posición firme en contra de la legalización, lanzó un duro juicio sobre los posibles efectos del consumo de la droga.


En un fuerte alegato, Uribe criticó al Congreso por considerar la legalización mientras, según él, aumenta el número de universitarios con enfermedades mentales relacionadas con el consumo de drogas. El expresidente expresó su preocupación por el hecho de que la discusión y decisión sobre este proyecto coincida con el creciente problema de salud mental entre los jóvenes.


Además, Uribe arremetió contra los congresistas que respaldaron el proyecto, acusándolos de ocultar su apoyo durante la reciente campaña electoral. Sugirió la necesidad de realizar una consulta ciudadana para que la población tenga una voz directa en este tema crucial.


El expresidente insistió en que el consumo de marihuana en Colombia es ilegal, a pesar de que no esté penado con cárcel. Criticó la idea de legalizar el consumo recreativo, argumentando que tendría consecuencias negativas, especialmente para los jóvenes. Utilizó una imagen impactante al afirmar: "Entonces, papá y mamá 'trabados' y los niños respirando el veneno y los jóvenes a la suerte de la calle".


Uribe advirtió sobre posibles repercusiones, incluido un impacto en la reputación turística del país y un aumento del mercado ilegal de drogas, señalando ejemplos de países con legalización. Además, hizo referencia a la situación en Estados Unidos, donde según él, la legalización de la marihuana ha contribuido a problemas como el aumento del consumo de otras drogas y la tragedia del fentanilo.

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