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El menor se encuentra bajo atención médica tras el presunto ataque. Autoridades adelantan las investigaciones para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades |
La tragedia ocurrió en la madrugada del domingo 26 de enero, alrededor de las 3:10 a.m., cuando la Policía Metropolitana de Bogotá recibió una llamada de emergencia desde una vivienda en el sur de la ciudad. Al llegar al lugar, los oficiales se encontraron con la madre del menor, quien, visiblemente afectada, relató lo ocurrido. Según su testimonio, la pareja sentimental de la mujer había agredido al niño en el abdomen y, como si fuera poco, le habría causado una herida grave al empalarlo. “Mi pareja fue quien lo golpeó”, afirmó la madre al ser interrogada por los uniformados en el lugar.
La policía, al percatarse de la gravedad del hecho, procedió de inmediato a trasladar al niño a un centro médico cercano, donde se le brindó atención de urgencias. Las autoridades confirmaron que el menor presenta lesiones severas, que ponen en riesgo su vida, lo que ha generado una ola de indignación en la opinión pública.
Por su parte, la sospechosa, identificada como la madrastra del niño, fue detenida en el lugar de los hechos. En medio de la investigación, se han recabado declaraciones que apuntan a un posible patrón de abuso por parte de la mujer, quien habría tenido antecedentes de violencia hacia el menor. Sin embargo, aún se están verificando los detalles del caso para determinar el grado de responsabilidad de la madrastra en este acto macabro.
Las autoridades están analizando las pruebas recabadas y se espera que en las próximas horas se dé a conocer el curso de la investigación. Mientras tanto, la madre del niño está siendo también cuestionada para esclarecer su versión de los hechos y determinar si tuvo conocimiento de los maltratos previos.
Este caso se suma a la creciente preocupación por el abuso infantil en Bogotá y en otras partes del país, donde los menores de edad continúan siendo víctimas de violencia por parte de aquellos que deberían protegerlos. La situación ha generado una respuesta contundente de organizaciones defensoras de los derechos de la niñez, quienes han exigido una mayor atención por parte de las autoridades para frenar estos actos inhumanos que, lamentablemente, siguen siendo comunes en muchos hogares.
La Policía Metropolitana de Bogotá ha asegurado que se seguirá investigando con el mayor rigor, y se esperan más detalles en los próximos días sobre el esclarecimiento de este caso que ha dejado a toda la ciudad en estado de alerta.
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