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ELN negó cualquier responsabilidad en el ataque y calificó el hecho como parte de una “estrategia de campaña
El grupo insurgente aseguró que la incineración del vehículo sería parte de una “estrategia de campaña desesperada” y rechazó cualquier participación en los hechos.


El Ejército de Liberación Nacional (ELN) salió al paso de las versiones que lo vinculan con la incineración del vehículo en el que se movilizaba Juan Carlos Santamaría, coordinador de la campaña presidencial de Abelardo de la Espriella, ocurrido en los límites entre Arauca y Norte de Santander.


Mediante un video difundido en redes sociales, el ELN negó cualquier responsabilidad en el ataque y calificó el hecho como parte de una “estrategia de campaña desesperada”, insinuando que podría tratarse de un autoatentado con fines electorales.


“Estas acciones hacen parte de una estrategia de campaña desesperada, basada en autoatentados y shows mediáticos, con la que buscan manipular a la opinión pública, victimizarse y obtener un reconocimiento que no se han ganado ante la ciudadanía”, afirmó la organización insurgente.


El grupo armado también pidió a las comunidades del oriente colombiano no dejarse influenciar por “politiqueros que solo aparecen en tiempos de campaña” y rechazó las acusaciones que lo vinculan con el ataque.


El incidente generó gran repercusión en redes sociales y fue replicado por diversas figuras políticas, incluyendo al expresidente Álvaro Uribe Vélez, intensificando la discusión sobre la seguridad y la estrategia de las campañas electorales en la región.




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