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Se instaló una mesa de diálogo entre campesinos y el Gobierno, en la que se comprometieron a buscar alternativas para la tenencia de la tierra.


Con mediación de la Defensoría del Pueblo se logró el levantamiento de la movilización y el refugio humanitario que adelantaban cerca de mil campesinos en Tierralta, sur de Córdoba, ante el presunto incumplimiento del Programa Nacional de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito.


"Con la mediación de nuestros funcionarios logramos levantar la movilización que adelantaban miembros la Asociación de Campesinos del Alto Sinú (Asodecas). Se instaló una mesa de diálogo con los campesinos y entidades del Gobierno, que se comprometieron a revisar contratos y buscar alternativas para el acceso y tenencia de tierra", dijo el defensor del Pueblo, Carlos Camargo.


"Los líderes campesinos también nos han manifestado su preocupación por amenazas e intimidaciones recibidas, las cuales rechazamos de manera enfática. Solicitamos a la Unidad Nacional de Protección (UNP) y a las autoridades competentes la implementación de medidas efectivas para su protección", expresó Camargo.


La mesa de diálogo fue instalada y liderada por la Defensoría para ponerle fin a la movilización. La entidad informó que hará seguimiento a los compromisos acordados entre los campesinos y las entidades nacionales y departamentales.


Participaron también en este espacio la Dirección de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícitos, la Agencia Nacional de Tierras, los ministerios de Interior, Ambiente, Agricultura, Procuraduría General de la Nación, Ejército Nacional, Policía Nacional, Gobernación de Córdoba, Alcaldía de Montería y Personería de Tierralta, Parques Nacionales Naturales, Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú, MAPP/OEA y firmantes del acuerdo de paz.


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