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Dairo Martínez, un campesino que sacrificó este 8 de mayo del presente año día de la madre, un cerdo para repartírselo a las mamás del poblado; fue asesinado por sujetos desconocidos en el cuarto día del paro armado convocado por el grupo paramilitar Clan del Golfo, quienes declararon una ofensiva terrorista sin precedente histórico en el país, contra el gobierno nacional por haber extraditado a su líder, Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, a una cárcel de los Estados Unidos.


Hoy, el hombre de 50 años de edad, Dairo Martínez, quien residía en el corregimiento de Puerto López, municipio de Guaranda, Sucre, vertiente del rio Cauca, recibió varios disparos de arma de fuego, por violar presuntamente el paro armado de las Autodefensas.


Los hechos se registraron a las 10:40 minutos de la mañana en el poblado ribereño; las autoridades locales rechazaron el hecho violento que tiene consternada la región. Una fuente no oficial manifestó, que los habitantes del sector están sitiados por actores armados y que no tienen ni como alimentarse.


Un vocero del municipio de Santa Rosa del sur, Bolívar, que pide reserva de su identidad, manifestó que el grupo paramilitar debe sacar a la población civil del conflicto armado y que este es un enfrentamiento con el estado colombiano y no con los pueblos humildes de Sucre, Córdoba y sur de Bolívar, que están llevando “del bulto” el peso sangriento del paro armado que arroja victimas y daños materiales.


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