Durante su visita a Budapest, el papa Francisco volvió a hacer un llamado a los líderes mundiales para trabajar por la paz y un futuro lleno de esperanza. En su mensaje tras la oración del Regina Coeli, el pontífice hizo referencia a la guerra en Ucrania y pidió a la Santísima Virgen mirar a los pueblos que más sufren, especialmente al pueblo ucraniano y ruso.
El Papa enfatizó la importancia de la construcción de la paz y de dar a las jóvenes generaciones un futuro lleno de esperanza y no de guerra. En sus palabras, hizo un llamamiento a los líderes para construir un mundo de hermanos y no de muros, y para trabajar juntos en la búsqueda de la paz.
Durante su visita a Hungría, el papa Francisco ha hecho varias referencias a la necesidad de una Iglesia que acoja a los migrantes, y en su mensaje final lamentó "las puertas cerradas". El papa concluirá su visita a Hungría con un discurso dirigido al mundo académico y universitario.
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