Álvaro Uribe se encontró con el hijo del Mono Jojoy en El Ubérrimo: “El país debe empezar a dialogar”

El firmante de paz y su esposa sostuvieron una visita con el exmandatario para dialogar acerca de las diferencias de ideologías y las problemáticas nacionales

En un esfuerzo significativo hacia la reconciliación, Jorge Suárez, hijo del líder guerrillero Víctor Julio Suárez, alias 'Mono Jojoy', se encontró con el expresidente Álvaro Uribe en su hacienda El Ubérrimo. Esta reunión, que tuvo lugar el 2 de junio de 2024, fue organizada por la periodista Catalina Suárez, esposa de Jorge Suárez, como parte de la promoción de la paz y la reconciliación.

Catalina Suárez, quien ha mantenido una relación cercana con Uribe, destacó que este encuentro era especial debido a las profundas diferencias históricas entre su esposo y el exmandatario. "Conversamos de país y de mucha historia, de dolores profundos de una Colombia que necesita respetarse y tener oportunidades", comentó Jorge Suárez.

Durante la visita, se habló de la necesidad de promover diálogos vinculantes para avanzar en la paz cotidiana, una visión compartida por el presidente Gustavo Petro. Jorge Suárez destacó el papel de estos diálogos en la superación del conflicto y la violencia en Colombia.

"Firmé La Paz para trabajar día a día desde lo más real y difícil por alcanzar diálogos entre diferentes e impensables y ayudar a sembrar semillas de paz, verdad y país", aseguró Suárez. Desde la firma del acuerdo de paz, se ha dedicado a tender puentes con diversos sectores, buscando combatir las etiquetas que impiden la reconciliación.

Como símbolo de invitación a la paz, los esposos Suárez le entregaron a Uribe su libro "Podéis ir en Paz", donde narran su historia de amor y reconciliación a pesar de sus posturas políticas contrarias. Catalina Suárez enfatizó que estos encuentros son cruciales para el desafío de la reconciliación nacional, promoviendo diálogos sin ataques ni enemistades.

Este evento es un paso importante hacia la construcción de un país donde las diferencias puedan ser discutidas y resueltas pacíficamente, mostrando que el diálogo y la comprensión son posibles incluso entre antiguos adversarios.