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“Tiene sus uñitas comiditas, está muy ansioso. Es entendible. Ahora lo importante es sanar con amor”, afirmó

Después de 18 días de estar secuestrado, Lyan Hortúa, un niño de 11 años, volvió con su familia. Fue entregado este miércoles en zona rural de Jamundí a una comisión humanitaria de la Defensoría del Pueblo.


Angie Bonilla, su madre, lo recibió con lágrimas y abrazos. “Mi hijo volvió a nacer”, dijo. Contó que el niño se encuentra muy nervioso y asustado. “Tiene sus uñitas comiditas, está muy ansioso. Es entendible. Ahora lo importante es sanar con amor”, afirmó.


Durante el tiempo del secuestro, la familia decidió no hablar públicamente. Aun así, agradeció a quienes los acompañaron. “Dios les pague por el apoyo y por ser voz cuando nosotros no podíamos hablar”, expresó.


También aclaró los rumores que circularon mientras Lyan estaba retenido. “Mi familia es trabajadora, no tenemos deudas ni negocios raros. Nos esforzamos cada día como cualquier colombiano”, agregó.


Jorsuar Suárez, padrastro de Lyan, también habló tras el reencuentro. Dijo que durante los primeros días del cautiverio el niño estuvo amarrado de manos. “Eso nos duele, pero estamos felices de tenerlo de vuelta. Sabemos que poco a poco va a sanar”, indicó.


Suárez contó que, aunque Lyan requiere medicamentos por su condición de salud, lograron hacerlos llegar hasta donde lo tenían. Además, pudieron hablar con él por videollamada en dos ocasiones.


“Me duele como padre no haber estado allí para evitar que se lo llevaran. Le pedí perdón. Le dije que me perdonara por no haberlo podido salvar”, afirmó con voz entrecortada.


También señaló que su familia nunca había recibido amenazas y que no entiende por qué fueron blanco de un secuestro. A pesar del dolor, dijo que perdona a quienes lo retuvieron.


El padrastro cuestionó además la seguridad del conjunto residencial donde viven. Aseguró que tiene tres porterías y que la noche del secuestro no hubo respuesta a los llamados de emergencia.


Tras su liberación, Lyan fue valorado por médicos de la Fundación Valle del Lili en Cali. La institución informó que el niño está estable y continuará bajo observación médica.


La Policía confirmó que ya hay órdenes de captura contra los responsables del secuestro. El caso generó preocupación en todo el país y motivó múltiples llamados ciudadanos por su liberación.

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