El crimen ocurrió en la aldea Plan de Los Mangos, en Jesús de Otoro, Intibucá. El agresor fue capturado y confesó que actuó para evitar que otros vivieran lo mismo. |
El hecho ocurrió el pasado domingo. Según la versión entregada por el propio Palacios, su acción fue motivada por los constantes abusos sexuales que, asegura, sufrió durante años por parte de su padrastro. “Él abusó de mí. Terminé con la plaga”, declaró, afirmando también que quería evitar que otros jóvenes pasaran por lo mismo.
Palacios relató que había salido a buscar leña y, al regresar, encontró a Reyes Santos dormido. Fue entonces cuando decidió atacarlo: primero lo hirió con el filo del hacha y luego le propinó dos golpes más que acabaron con su vida.
Una llamada al 911 alertó a las autoridades, quienes llegaron al lugar y lograron capturar al agresor en vía pública. El caso está siendo investigado por la Fiscalía hondureña, que determinará las circunstancias exactas del homicidio y si existen antecedentes o denuncias previas contra la víctima.
El crimen ha generado reacciones divididas en la comunidad: mientras algunos expresan solidaridad hacia Héctor por su historia, otros exigen justicia debido a la gravedad del acto. El caso también ha encendido un debate urgente sobre el abuso sexual silenciado dentro de muchas familias hondureñas.
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