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Leonor Nisperuza viajaba como parrillera en una motocicleta conducida por su compañera Lina Páez
La víctima, quien viajaba como parrillera hacia su trabajo en el CAMU de Rabolargo, falleció tras luchar por su vida en una clínica de Montería. La vía donde ocurrió el hecho sigue generando preocupación por su peligrosidad.


En la tarde de este miércoles 9 de julio se confirmó el fallecimiento de Leonor Nisperuza, quien había resultado gravemente herida en un siniestro vial ocurrido en la vía que conecta el corregimiento de Rabolargo con el casco urbano de Cereté. Leonor, oriunda de la vereda Las Marcelitas, se dirigía a su trabajo en el CAMU de Rabolargo cuando ocurrió la tragedia.


Leonor Nisperuza viajaba como parrillera en una motocicleta conducida por su compañera Lina Páez, quien perdió la vida en el lugar de los hechos. Leonor fue trasladada en estado crítico al hospital San Diego y posteriormente remitida a una clínica en Montería. Pese a los esfuerzos médicos, falleció debido a la gravedad de las lesiones.


Según versiones preliminares, el siniestro ocurrió cuando Lina perdió el control de la motocicleta al verse sorprendida por un camión cargado de ganado que circulaba por una curva peligrosa. Aunque no se reportó exceso de velocidad, se evidenció nuevamente la falta de señalización y las condiciones inseguras de esa vía rural.


Este trágico suceso enluta a la comunidad cereteana, especialmente al personal del CAMU de Rabolargo, que pierde a dos mujeres dedicadas al cuidado y la salud de su gente. Cabe recordar que Leonor apenas se recuperaba de otro difícil episodio en su vida, luego de que un vendaval destruyera su vivienda meses atrás.


Las autoridades hacen un llamado a los conductores a transitar con mayor precaución, especialmente en zonas rurales.

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