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| El alcalde Alejandro Éder calificó el hecho como un “ataque narcoterrorista” y anunció medidas de seguridad para blindar la ciudad. |
El artefacto, instalado en un vehículo, provocó graves daños en edificaciones y automotores, además de escenas de pánico entre los habitantes del sector. Videos difundidos en redes sociales mostraron la magnitud de la detonación y a ciudadanos auxiliando a personas en estado crítico.
El alcalde Alejandro Éder condenó lo ocurrido y lo calificó como un “ataque narcoterrorista” contra la ciudad. En su declaración anunció una recompensa de hasta 400 millones de pesos por información que permita dar con los responsables, al tiempo que reiteró que Cali no se doblegará ante la intimidación violenta.
“Quiero que los caleños sepan que no nos vamos a doblegar ante los terroristas. Estamos trabajando de manera conjunta con la Policía, el Ejército y la Fuerza Aérea para proteger nuestra ciudad y dar con los culpables de este acto criminal. Invitamos a la ciudadanía a llamar a la línea 123 y entregar datos que puedan evitar nuevos ataques”, expresó el mandatario.
Entre las medidas de seguridad, la administración distrital ordenó el cierre y control de accesos a Cali, además de restringir la circulación de camiones de más de cuatro toneladas entre las 7:00 p.m. y las 4:00 a.m., hasta nueva orden.
Mientras las autoridades confirmaron inicialmente dos personas heridas, versiones no oficiales hablan de al menos cinco fallecidos y once heridos. La Personería Distrital rechazó el atentado, calificándolo como un acto atroz contra la vida y la tranquilidad de los caleños.
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