Con James y Yerry Mina entre la alineación, inició la primera prueba de exigencia para el Everton ante el Liverpool líder de la Premier League que llegaba con cuatro victorias consecutivas. El juego terminó con un contundente 2-2 en el Estadio Goodison Park.
Un partido lleno de lesiones, expulsiones, que cortó la racha de triunfos del Liverpool gracias a James Rodríguez que logró sacar varios centros precisos, haciendo valer su mágica zurda. Uno de ellos terminó en gol de Michael Keane al minuto 19. Lanzamiento desde la derecha por parte del colombiano a la cabeza de su compañero para anotar el que era el tanto del empate parcial.
Durante los primeros 3 minutos del partido, el Everton fue sorprendido por Mané, el jugador más intrépido y peligroso del Liverpool, que recibió un centro desde la izquierda y no falló, remató fuerte y arriba y dejó fríos a los jugadores locales.
Liverpool exhibió su mejor fútbol, de toques rápidos, de cambios de frente, con su dinámica y su sorpresa hacía estragos, pero esto no desanimó a los jugadores azules del Everton luego de las diferentes bajar que se presentaron en el partido como la caída de Van Dojk en Liverpool, de Coleman en Everton. El partido se fue emparejando poco a poco.
El colombiano Yerry Mina, tuvo un momento de desconcentración, una pelota que dejó dando vueltas en el área, llega a las piernas de Salah, que no desaprovechó para el 1-2 que le devolvía el triunfo al Liverpool.
El partido finaliza, la derrota del Everton se consumaba. Pero el goleador Calvert-Lewin apareció con un cabezazo que significó el sufrido y luchado empate contra un rival de mucha jerarquía.
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